La quesería lanzaroteña, negocio familiar desde hace casi dos décadas, triunfa con la mejor elaboración de Canarias.
Leonor Díaz, izquierda, ayer, junto a sus hijos Yolanda (con un queso Guatisea tierno) y Alexis Hernández, en la Quesería Montaña Blanca.A.F.
La Quesería Montaña Blanca, explotación familiar artesanal situada desde hace casi dos décadas en el pueblo del mismo nombre en el municipio de San Bartolomé, está en racha. Si el pasado 20 de mayo se alzaba con el primer premio al mejor ejemplar de cabra de leche y el tercero al mejor lote de ganado caprino en la Feria del Ganado de Uga (Yaiza), tan solo dos semanas después el queso tierno Guatisea elaborado con leche pasteurizada de cabra obtenía el premio al Mejor Queso de Canarias en el XVI Concurso Nacional de Quesos Tabefe del Cabildo de Fuerteventura, al ser el más puntuado, con 1.575 puntos, y también con el primer galardón en esa categoría.
La familia Hernández Díaz no podía estar ayer más satisfecha por el galardón más importante de toda su trayectoria, que se inició décadas atrás con la labor y el ganado que heredó Leonor Díaz, dueña del negocio, de su padre, Félix Díaz. Un trabajo que Leonor ha desarrollado junto a su esposo, el ganadero Juan Hernández. Ambos están jubilados pero sus tres hijos, Alexis, Yolanda y Dunia, sacan adelante el negocio familiar, que cuenta con un total de ocho empleados entre los que atienden al ganado y la quesería.
El Guatisea tierno compitió con otros 107 quesos de cabra procedentes de todas las Islas Canarias, a excepción de El Hierro, y de las comunidades autonómas de Andalucía, Extremadura, Castilla La Mancha, Murcia y La Rioja. El 60% de las muestras a concurso eran del Archipiélago y el 40% restante, de la Península, informó la corporación insular majorera.
La pieza de tierno que envió Montaña Blanca a la competición pertenece al lote que se elaboró el pasado 4 de mayo y se presentó al concurso diez días después.
El maestro quesero de la familia es Alexis, quien destacó la pasada jornada que uno de los secretos para lograr un buen producto es que «la leche con la que elaboramos nuestros quesos es de producción propia y no se la compramos a otros productores, por lo que conocemos de primera mano la materia prima con la que trabajamos». A lo anterior añadió Alexis, se suma «otro requisito fundamental, la buena calidad de toda la materia prima, tanto de los animales como del alimento que les damos, alfalfa, que cosechamos nosotros, y paja y mezcla de cereales». Tampoco hay que olvidar «el mimo con el que cuidamos a nuestras cabras», destacó Alexis.
La cabaña de Montaña Blanca cuenta con un millar de cabezas de la denominada raza majorera y con ella se lleva a cabo el pastoreo tradicional. Todos los ejemplares han nacido en Lanzarote. De las cabras se extraen unos 1.000 litros de leche al día y los queseros hacen 140 kilos de queso fresco diarios.
Manuel Montelongo es uno de los clientes habituales que acude desde Arrecife para adquirir el queso fresco. «Me encantan la textura y el sabor que tiene. He probado quesos frescos de otras marcas y no es lo mismo», afirmó este vecino de la capital.
Además del fresco y el tierno, Montaña Blanca hace en sus instalaciones el semicurado, los semicurados de pimentón y hierbas provenzales, el curado, el curado pimentón, el curado hierbas y el queso viejo, que se pueden adquirir en la propia quesería y en tiendas de alimentación.
Junto a los recientes reconocimientos, Montaña Blanca tiene, entre otros trofeos, las medallas de bronce del concurso World Cheese Awards 2015, la cita anual más prestigiosa del mundo del queso, para su semicurado y curado.
Todos los quesos de Montaña Blanca se llaman Guatisea, por la montaña próxima a esa quesería, una de las 18 de la Isla que integran la Asociación de Queserías Artesanales de Lanzarote (Aqual).